La reciente decisión de Warner Brothers de eliminar todo su catálogo de pantalones cortos originales de Looney Tunes de HBO Max ha enviado ondas de choque a través de la comunidad de animación. Estos pantalones cortos icónicos, que se extendieron de 1930 a 1969, representan la "Edad de Oro" de la animación y desempeñaron un papel fundamental en el establecimiento de Warner Brothers como un nombre familiar.
Según la fecha límite, este movimiento es parte de una estrategia más amplia para centrarse en la programación de adultos y familiares, ya que, según los informes, el contenido de los niños no atrae una audiencia significativa en la plataforma. Este cambio en las prioridades se produce a pesar del significado cultural de la serie Looney Tunes. La decisión de cancelar el acuerdo con Sesame Street para nuevos episodios a fines de 2024 subraya aún más esta tendencia, ignorando el valor educativo que el programa ha proporcionado desde 1969. Si bien algunos nuevos spin -off de Looney Tunes permanecen disponibles en HBO Max, la esencia de la franquicia se ha eliminado.
El momento de este anuncio es particularmente discordante, coincidiendo con el lanzamiento teatral de "The Day the Earth Wall Up: A Looney Tunes Story" el 14 de marzo. Inicialmente encargada por Max, la película se vendió a Ketchup Entertainment a través del mercado de cine estadounidense después de los hermanos Warner y Discovery Merge. Los limitados esfuerzos de marketing del nuevo distribuidor han dado como resultado una modesta desempeño de taquilla, con la película ganando poco más de $ 3 millones durante su primer fin de semana en más de 2,800 teatros en todo el país.
La eliminación de los pantalones cortos de Looney Tunes y el manejo de proyectos recientes como "The Day the Earth Will Up" y "Coyote vs. Acme" han provocado una reacción significativa. El año pasado, Warner Brothers Discovery optó por no lanzar "Coyote vs. Acme", citando los costos de distribución, a pesar de que la película se completó por completo. Esta decisión provocó críticas generalizadas de la comunidad artística, con el actor fortificará etiquetarlo como "tulls de King - t" y expresar su frustración por la elección del estudio.
La protesta por "Coyote vs. Acme" sugiere que habría una audiencia fuerte para "el día en que explotó la tierra" si más personas conocían su disponibilidad en los cines. La controversia en curso destaca la tensión entre las decisiones comerciales y la preservación del patrimonio cultural en la industria del entretenimiento.